En la practica deportiva los beneficios de la medicina hiperbárica como terapia complementaria derivan de la hiperoxia tisular inducida por la TOHB.

La mayoría de las lesiones deportivas se producen por el exceso de entrenamiento, provocando lesiones musculo-ligamentosas, que fluctúan entre calambres musculares, rupturas parciales o totales y el dolor muscular de aparición tardía. Los beneficios de la hiperoxia están asociados a la disminución del edema por vasoconstricción, ya que produce una disminución en la proliferación de las citoquinas proinflamatorias, reduciendo la cascada inflamatoria, aumenta la actividad bactericida de los leucocitos, aumenta la capacidad reológica de los eritrocitos y favorece el aclaramiento del lactato y el amonio.

El aumento de aporte de oxígeno produce un aumento en la expresión del factor del crecimiento vascular endotelial, el factor de crecimiento de fibroblastos promueve la angiogénesis, la osteogénesis y la proliferación de fibroblastos contribuyendo a la cicatrización y reparación de las lesiones.

La TOH puede acelerar el proceso de recuperación de estas lesiones y según la literatura médica descrita en estos deportistas de elite existe una recuperación de hasta el 55% más rápida.

Estos procesos se dan de igual manera en las lesiones de tobillo y esguinces.